Piedras con té...

-Falta tanto para el invierno y la noche ya llegó... mirá!-

-Hace frío y tengo que abrigarme, pero parece que se metió por mi nariz y...-

-¿Con qué se abriga uno por dentro?...-

-Tomemos un té!!...-

-Claro, el calor se transfiere...-

- ¿De frutilla, o con limón, verde o negro? es el mejor...-

-Uno que pinte tantos gustos en mi boca y genere el calor, que me pase el calor de los colores, que tejan una bufanda para este corazón que se quedo afuera y se heló...-

-Con esa helada de la indiferencia...lluve?-

-Y llora, claro!!! ¿qué pensabas que iba a hacer?...

-¿Nadie sabe esa teoría de que "lo que por fuera es duro en su interior es blando como el algodón"?...

-¿Quien la inventó?...-

- Seguro que no fue el mismo que invento las piedras... ellas no saben de blandeses... solo de durezas...-

- ¿Ellas transmiten el calor?...-

- No, creo que solamente lo expropian, no lo asumen, y dejan que se vaya... en eso pasan un buen rato... se burlan del calor... de frutilla... gracias...-

-De nada... miremos las cosas que pasan como eso de pasar el calor... una cucharita?-

-No, gracias... no entiendo...-

- Claro, como dar... dejar que se resuelvan.. tus lágrimas te alivian pero no hacen cambiar a las piedras...

-¿Y si hablamos?-

-Mejor dejemos que se ablanden por fuera, quizás el tiempo y los roces las rompan y pum... descubramos sus blandeces... no?.. azúcar?-

-No, gracias... es mejor así, simple y cotidiano, si le hecho azúcar quizás pierda su naturaleza... su ser "te de frutilla", sería "te de frutilla con azúcar" y eso no es lo mejor... ¿por qué serán duras las piedras?-

-Se guardaron para si eso que venían a dar, creo... nunca hable con ellas... viste que no hablan, son como las mascaras, tampoco lloran...